martes, 29 de junio de 2010

en tus brazos morir

ver tus ojos mirando en mi dirección es un regalo del que tal vez pocos pueden comprender su importancia. tu sonrisa alumbrando nuestro alrededor es la luz más divina que me ha tocado presenciar, y tu risa la melodía más hermosa junto a tu voz. es que me siento tan agradecida de que estés en mi camino.. no creo en un dios, pero creo en haber forjado mi destino, con cada pequeña decisión que tomé a lo largo de mi corta vida. cada cosa, por más simple que sea, fue dando paso a una y otra elección, guiandome de a poco hasta a tí. y por sobre todo estoy feliz de poder probar tus labios, ser la reina de tus deseos y sueños. ser la mujer que amas era mi fantasía más utópica.. y verla ahora hecha realidad me hace llorar de felicidad. llamenme cursi, perdida, no me importa. estoy profundamente enamorada y a pesar de eso tengo los pies en el suelo. es que te valoro a cada día, eres lo único que tengo, y realmente te quiero a mi lado para siempre.

martes, 1 de junio de 2010

just kiss me II

hoy te quiero sentir cerca de mí para
decirte hoy que estoy loco por ti..

Pero dile, mierda, Frank, dile. Para algo planeaste salir con ella este dia, dile, dile, dile, dile. ¿Qué es lo peor que puede pasar?

Ella rió muy fuerte y yo le seguí. Con ella siempre todo risas.

-Está lindo aqui.. -tomó un sorbo de café- ¿Habias venido antes?
-Como dos veces, pero remodelaron, asi que es como primera vez.
-Mirenvé -sonrió y siguió conversandome.

kiss me, I'm contagious I

contigo las cosas parecen tan simples.. no puedo esperar a verte un dia más
hay tantas cosas que quiero decirte, pero me falta valor.

Ya, lo tienes al lado. Dícelo, de forma casual. Están fumando, están viendo la nada, ambos en sus mundillos mentales, sácalo de ahi. Dile, dile lo que sientes.

-¿Consuelo?

No me respondió al tiro. ¿Por qué le hablé en todo de pregunta? Soy un idiota, no debí haberlo hecho asi. Bueno, si se lo hubiese lanzado de una tal vez no hubiese escuchado y.. qué desastre.

-Dime -dijo sin despegar sus ojos de la calle, edificios, gente, vehículos, todo. O en realidad nada.
-No.. Creo que no debí distraerte.
-¿Pero me ibas a decir algo?
-No.

Terminó su cigarro y ahí recién se volteó y me miró. ¿Qué tiene que me paraliza? Sin embargo no desvié mi vista. Su castaño cabello se le iba hacia adelante por el viento y estaba más pálida por el frío. Su bufanda gris le tapaba a medias el cuello. Te ves hermosa...

-¿Qué piensas tanto? -esbozó una sonrisa de interés y sus ojos bajaron por todo mi cuerpo hasta volver a mi cara.
-Nada muy especial; ahora que te ves linda.

Se semi-rió mirando el suelo. Me lo esperaba, no se creía linda, no iba a dar las gracias por algo que consideraba mentira.

-¿Un café? -se levantó. Es muy delgada, me gusta. Me encantas.